1 de diciembre de 2011

La agresividad en la pareja.



Las relaciones de pareja, inicialmente basadas en el amor y en la atracción física, con frecuencia evolucionan hacia un modelo de lucha jerárquica en la que predomina la agresividad. El objetivo de esta tertulia es detectar los orígenes y causas de esa agresividad y encontrar soluciones prácticas para erradicarla o, al menos, mantenerla en niveles soportables.


Antes de entrar en el tema quisiera definir los dos términos relacionados en el mismo: pareja y agresividad.
Hay varias clases de parejas, pero yo me voy a referir sólo a la unión de un hombre y una mujer por amor, con voluntad de permanencia y el deseo de formar una familia.
La agresividad se define como un estado emocional que consiste en sentimientos de odio y deseos de daño a otra persona, animal u objeto.
Desgraciadamente, por más que una pareja trate de llevar una relación muy equilibrada, siempre surgirán diferencias y conflictos. Son dos las razones fundamentales que, a mi entender, dan lugar a estas tristes situaciones. La primera sería la diferente estructura cerebral del hombre y la mujer. Esto hoy día es un dato científico incuestionable. Se sabe que el cerebro de la mujer está más desarrollado en el aspecto emocional y en un sentido práctico de las cosas, mientras el hombre es más abstracto y lógico. El otro factor a tener en cuenta es que son dos personas con diferentes mundos, los cuales representan la historia de sus familias de origen, las experiencias de lo que han vivido, de lo que han experimentado con otras personas, de cómo se han ido sintiendo a lo largo del proceso de su propia vida. Además a estos factores hay que añadir las creencias, ideas, gustos, etc. etc.
Ahora bien, ¿por qué esas diferencias y conflictos terminan generalmente en peleas y discusiones? Yo creo que esto ocurre cuando se quiere imponer el criterio de uno, cuando no se sabe negociar, por mala comunicación o por tener una expectativa diferente de lo que el otro hace.
Pero como a pesar de todo, para cumplir nuestro fin último y fundamental como seres vivos de multiplicarnos y continuar la especie, debemos compartir nuestra vida como pareja del mejor modo posible, teniendo como base que somos seres distintos y que se debe respetar al otro, pues sin este respeto se acaba el amor y la pareja.
Algunos consejos para evitar la agresividad serían:

A) Identificar el problema.
B) Discutir en un lugar y momento adecuado.
C) Aprender estar en desacuerdo sin pelear.
D) No buscar culpables, sino soluciones
E) Centrar la discusión en el problema, no en la persona.
F) No pretender tener la razón. Ser tolerante.

Creo que cuando valoramos, aceptamos y respetamos a la persona que amamos y no queremos imponer nuestro criterio, tenemos la posibilidad de vivir en armonía y pacíficamente.

http://tertuliafilosoficatoledo.blogspot.com/2007/05/la-agresividad-en-la-pareja.html