19 de diciembre de 2011

El trabajo doméstico: la moderna esclavitud.

Millones de trabajadoras domésticas sufren abusos, discriminación y sobre explotación laboral. La ley no las protege, pese a que su trabajo es fundamental para el funcionamiento de la economía.

El trabajo doméstico es uno de los oficios más antiguos y una de las ocupaciones más importantes para las mujeres a nivel mundial. Aunque sigue siendo parte de la economía informal, es indispensable para el funcionamiento de la economía fuera de la esfera doméstica.

Los trabajadores domésticos se ocupan de labores de limpieza y preparación de alimentos, cuidado de niños y de ancianos, trabajos de jardinería, de choferes y personal de compañía en los hogares más diversos.

Según la Organización Internacional del Trabajo (OIT) unos 100 millones de personas trabajan en este sector, la gran mayoría mujeres, y pese a su importancia a nivel global, no hay cifras confiables debido a que sigue siendo parte de la economía informal.

Pocos países tienen legislaciones que protegan los derechos de las trabajadoras domésticas y donde hay leyes lo común es que no se respeten. "Los patrones prefieren no darse cuenta de que las trabajadoras del hogar tienen derechos y cuando alguna los reclama o es víctima de intimidaciones o es despedida injustificadamente. Es muy difícil cambiar esta cultura", afirma Marcelina Bautista Bautista, en conversación con Deutsche Welle.

Discriminación y abuso

Bautista, nacida en 1966 en Tierra Colorada, en el Estado de Oaxaca, comenzó a trabajar como empleada doméstica a los catorce años, cuando llegó a la ciudad de México, y ha vivido en carne propia la discriminación, abuso y explotación que sufre la gran mayoría de estas mujeres.

Con otras trabajadoras domésticas de diversos países latinoamericanos fundó en 1988 la Confederación Latinoamericana y del Caribe de Trabajadoras del Hogar, organización que proclamó el día 30 de marzo como el Día Internacional de Trabajadoras del Hogar a nivel continental. "Bolivia y Perú lograron que el 30 de marzo fuera un día nacional de las trabajadoras del hogar y además festivo".

"En México el proceso ha sido bastante lento, tenemos una iniciativa de ley desde hace 12 años y aún no ha sido aprobada, pese a que ya nos apoyan otras instituciones y organizaciones como la Comisión Nacional de Derechos Humanos del Distrito Federal (CDHDF)", señala.

La activista, que fue distinguida en Berlín con el premio de Derechos Humanos de la fundación Friedrich Ebert por su compromiso en la lucha contra las condiciones laborales injustas, señala que las trabajadoras del hogar sufren muchas formas de discriminación en el trabajo. Bautista lidera desde el 2000 el Centro de Apoyo y Capacitación para Empleadas del Hogar (CACEH).

"Hay mujeres que llevan hasta 30 años trabajando en una casa y no han tenido vacaciones. Hay mucho desconocimiento por parte de las trabajadoras y por eso no reclaman sus derechos", dice. "No tienen seguridad social, ni se respeta un horario de trabajo que debiera ser de ocho horas diarias, tampoco reciben vacaciones ni aguinaldo", añade.

Bautista señala que muchas mujeres prefieren trabajar "de entrada por salida", y no de planta porque resulta muy esclavizante, no tienen tiempo para estudiar ni para ver a la familia. CACEH promueve un salario mínimo de 250 pesos diarios por ocho horas de trabajo. También pide que se regule las horas extras, que no se emplee a niñas menores de 14 años y que se les permita seguir estudiando.

Secretaria General de la Confederación Latinoamericana y del Caribe de Trabajadoras del Hogar.

Violencia y desprotección

"Las trabajadoras sufren abusos sexuales, a veces tienen hijos de los patrones y son ellas quienes los crían, otras veces se mueren y nadie se entera. Esta situación de violencia que sufren las trabajadoras sigue estando oculto, trabajan solas, sin protección, la ley no permite que haya una inspección en los hogares porque es un lugar privado, pero nuestros derechos pueden morir ahí", lamenta.

"Cuando recién empezamos, las patronas nos decían que éramos las guerrillas. Porque enseñábamos y capacitábamos a otras mujeres. En un taller que organizamos y en el que abordamos el acoso sexual, nos dimos cuenta de que todas las presentes, unas 35 mujeres, habían sufrido abusos".

Los avances en la conquista de sus derechos han sido lentos. En el 2006 hubo un encuentro internacional sobre el trabajo doméstico que reunió en Amsterdam, Holanda, a numerosos grupos de Asia, África, América Latina y el Caribe. Ahí surgió la propuesta de formular un Convenio para las trabajadoras del hogar que fuera respaldado por la Organización Mundial del Trabajo (OIT). Se espera que este convenio sea aprobado en la conferencia de la OIT en 2011.

Según cifras de la OIT en América Latina 14 millones de personas se dedican al trabajo doméstico. Bautista señala que en Brasil el avance legislativo es bastante fuerte, en Chile la seguridad social es posible, así como en Paraguay y Argentina. Uruguay es ejemplar por la legislación que tiene. Perú, Bolivia y Costa Rica recientemente aprobaron leyes que las protegen. Pese a las leyes es muy difícil ponerlas en práctica, las mujeres siguen ganando sueldos ínfimos, se discrimina a las mujeres indígenas como se ve en los casos de México y Guatemala. "Tenemos mucho que hacer todavía, si no somos nosotras las que nos levantamos a luchar nadie lo va a hacer por nosotras", concluye.

Autora: Eva Usi

Editora: Claudia Herrera Pahl
http://www.dw-world.de/dw/article/0,,6297082,00.html

14 de diciembre de 2011

La verdad sobre la fotografía de las presuntas heroínas de Pearl Harbor.

El pasado 7 de diciembre se cumplió el 70 aniversario del ataque y bombardeo japonés a Pearl Harbor. Con tal motivo, multitud de publicaciones se hicieron eco de tal efeméride.
Relatos, fotografías y viejos documentales se publicaron y llenaron la red como recuerdo a aquel fatídico día de 1941 que propició la participación de los Estados Unidos en la Segunda Guerra Mundial.
Entre las múltiples fotografías utilizadas para homenajear y recordar a los héroes que fueron parte activa en esa jornada, se encontraba una en la que se podía ver a un grupo de valientes mujeres luchando para sofocar el fuego provocado en uno de los buques a causa del bombardeo.
Esas heroínas anónimas habían sido parte activa colaborando desinteresadamente y ayudando a su patria. La recompensa recibida por ello fue el formar parte de la historia ilustrada de aquel 7 de diciembre de 1941, publicándose en multitud de libros de texto e historia una instantánea que recogía el histórico momento.
Apenas unos días después de dichos homenajes se ha descubierto que dicha fotografía no fue tomada ese día. Las mujeres que salen en ella estuvieron en el lugar de los hechos.
Una serie de casualidades llevó a la web MSNBC a localizar hace unos días a la única superviviente de aquel grupo de mujeres. Katherine Lowe de 96 años de edad (en la fotografía, la segunda empezando por la derecha) relató que desconocía que esa instantánea hubiera dado la vuelta al mundo, a lo largo de los últimos 70 años, como símbolo del coraje y entrega en aquel nefasto día.
Recuerda que aquella mañana se dirigían hacia la iglesia cuando se produjo el bombardeo y allí permanecieron. Ella junto a sus compañeras, en la fábrica de piña en conserva donde trabajaban, decidieron alistarse para realizar trabajos de ayuda y extinción de incendios, para lo que recibieron entrenamiento específico y fue uno de esos momentos en el que realmente se debió tomar la famosa fotografía.
El dramatismo de la escena nada hizo sospechar de que se trataba de un error y durante las últimas siete décadas se ha mantenido como un auténtico icono de la importante aportación femenina a la Segunda Guerra Mundial.
Tras este descubrimiento se han revisado las múltiples publicaciones en las que se daba por hecho que la fotografía fue tomada instantes después de comenzar el ataque japonés.
La investigación periodística sobre el tema ha llevado a descubrir que realmente todas las personas que pertenecían al Departamento de Bomberos de Honolulu aquel 7 de diciembre eran hombres.
Lo más sorprendente del tema es que ninguna de las protagonistas de dicha fotografía, ni ninguno de sus familiares o descendientes, se hubiera percatado a lo largo de los últimos 70 años del error o se hubiese enterado que salían en una de las imágenes más famosas y más veces ha dado la vuelta en relación al ataque a Pearl Harbor.

Por Alfred Lopez | Blog de Noticias

Cambio de roles....mujer agresora.

La violencia emocional o psicológica en aumento en la familia y en la sociedad, como sabemos y no podemos negar, no escapa a las mujeres, donde en algunos casos son protagonistas.

He leído comentarios en algunos lugares donde piden que también se hable sobre este tema, y lamentablemente, también tenemos que admitir que existen mujeres violentas, y esa violencia volcada hacia la pareja, pero no se puede negar que muchas la ejercen en sus inocentes hijos, y esto es terrible. En este último caso urge la terapia psicológica, la ayuda profesional para la madre y también para restablecer los valores del niño maltratado.

Para no irnos del tema, te voy a dar datos sobre la violencia de la mujer, cambio de roles…. empecemos:

La violencia en el hogar es reflejo de una situación de abuso de poder en que la persona más fuerte y con más recursos. Habitualmente el hombre trata de controlar a su pareja, a la que percibe como vulnerable e indefensa, y desahoga en ella sus frustraciones.

Sin embargo, no es insólito que haya un cambio de roles respecto al esquema habitual de la violencia de pareja y se den casos de mujeres agresoras y de hombres víctimas. Hoy en día pueden verse mujeres jóvenes que se están comportando de modo agresivo. De esa violencia son víctimas novios y maridos, pero también hermanas y madres.

Este tipo de violencia es, sin embargo, mucho menos frecuente que la masculina. Las características más significativas de la violencia femenina en el hogar son las siguientes:

a) Generalmente es una violencia más psicológica que física. Es caracterizada por la presencia de humillaciones (abusos económicos, indiferencia afectiva, aislamiento al hombre en la familia, etcétera) y de desvalorizaciones generalizadas.

b) Es más frecuente cuando hay desigualdad en la relación de pareja. En concreto, constituyen un factor de riesgo las situaciones en las que el rol laboral o social del hombre es inferior al de la mujer , o en las que la mujer es mucho más joven que el hombre y plantea niveles altos de exigencia.

c) No es muy común que haya violencia física pero al desartarse es en forma muy intensa. Cuando la violencia surge como maltrato físico, aparece frecuentemente como respuesta a los malos tratos repetidos, en casos extremos de defensa propia o ante situaciones de miedo insuperable, en las que irrumpe la violencia de forma explosiva como consecuencia de una ira reprimida durante mucho tiempo.

A veces la resolución de algunos divorcios puede ser una forma de violencia psicológica para los hombres, sobre todo cuando se le dificulta mantener los vínculos afectivos con los hijos. En estos casos, y siempre que el hombre perciba como prioritario el lazo de padre ( lo que no siempre ocurre) , el hombre puede sentirse objeto exclusivamente de obligaciones económicas, sin los vínculos de unión con sus hijos.

Y por otra parte, en casos muy extremos, son poco frecuentes los homicidios conyugales protagonizados por mujeres. En estos casos el móvil más habitual suele ser frecuentemente una sensación incontenible de desesperación y de desamparo resultado generalmente de malos tratos reiterados y de una agresividad contenida.

Tú, si estás involucrada o viviendo la violencia emocional, psicológica, verbal, o inclusive física, estás necesitando urgentemente salir de este camino. Encuentra la paz y el equilibrio en tu vida, recupera tu autoestima lastimada tambien por el maltrato a ti misma. Considera estos puntos:

1.Sal del automaltrato. Debemos resolver la violencia que los demás ejercen sobre nosotros, pero tambien es necesario resolver la violencia que nos pertenece , esa violencia interna que nosotras tambien ejercemos con nosotras mismas y para con los demás. Solo Tú sabes el secreto de tus pensamientos y emociones, entonces enfrenta el cambio, aunque sea cansador a veces, sé perseverante y expresa tu enojo de manera inteligente.

2.Vuelca tus enojos en la solución de los problemas. Debes pensar y hablar de manera positiva de ti misma y de las situaciones, debes motivarte positivamente y hablarte en positivo. Ve esos rechazos , esas conductas agresivas contra tí como vias de soluciones, aperturas de pensamientos, creatividad para resolver ese problema, ve el lado positivo.

"El enojo enfocado a la gente es tensión.., pero el enojo enfocado en la solución es expansión" Bernardo Stamateas.

Adelante! Tú puedes cambiar!! Puedes liberarte de la violencia en todas sus formas.

http://www.momentosdevision.com.ar/15%20de%20abril%202011/Violencia%20dom%20Cambio%20de%20roles%20mujer%20agresora.htm

http://libresdeviolencia.wordpress.com/2011/01/09/violencia-domestica-cambio-de-roles-mujer-agresora/

13 de diciembre de 2011

Un nuevo cáncer llamado indiferencia…

El fin de semana vi, en una muestra de cine, la película "indiferencia" que me dejó pensando acerca de nuestra sociedad y lo que está pasando (al parecer) en muchas partes del planeta. A grandes rasgos describe lo que se vive en una escuela americana, los encuentros y desencuentros que tienen profesores y alumnos, incluso los padres de esos jóvenes en formación; nada alejado de lo que tenemos en nuestras aulas, en nuestra propia universidad…
¿Dónde quedaron las esperanzas?, ¿dónde quedaron los proyectos? ¿dónde quedaron las ganas de luchar por algo? ¿En qué momento la indiferencia se convirtió en una forma de vida?
El film inicia cuando un maestro sustituto llega a un salón, se presenta y les dice que los que quieran irse lo hagan; como siempre, el fanfarrón del salón hace un comentario peyorativo hacia una compañera, siendo expulsado automáticamente del salón; otro joven reta al profesor aventando su portafolio, como para ver quién puede más, a ver quién es más fuerte... En diferentes escenas esto se repite: jóvenes que reaccionan constantemente, donde atacan al recibir una orden, donde agreden a un maestro que los reprende por no entregar los deberes y que incluso, amenazan con matarlos. Una agresión sin motivo, una conducta que pareciera una forma de vida, pero ¿qué tipo de vida se debe tener para que sin provocación haya una respuesta agresiva? ¿Una conducta aprendida?, ¿respuesta a un estímulo constante?
En otra escena, una orientadora intenta hablar con una joven acerca de su futuro: la chica escucha, en total y absoluta apatía, refiere planes y proyectos irreales, respondiendo agresivamente cuando la orientadora le hace ver la realidad. ¿En qué momento se perdió la capacidad de desear o de buscar un camino? o como muy frecuentemente escuchamos en nuestros alumnos, de buscar alternativas; de ver más allá de lo que se tiene enfrente. ¿Dónde quedó la capacidad de crearse un lugar y no esperar a que otros se lo den? ¿En qué momento llegamos a esto como sociedad, donde andamos sin camino, sin razón?
Una mujer frente al televisor, un hijo abstraído en la computadora, un padre que llega y no recibe ningún saludo; pareciera que nadie se da cuenta de que llegó... Una habitación llena y al mismo tiempo tan vacía, viviendo sin ser visto en este hogar, en este mundo…
¿Cómo vivir sin ser vistos, sin ser escuchados, sin ser amados, solos? Pensemos ¿qué huellas dejaron los primeros lazos, la base de las relaciones que se establecieron con los demás?, ¿de qué se asieron? ¿si no hubo alguien/algo que los guiara, que los acompañara, quién los enseñó hacia dónde dirigirse?… el suicidio aparece entonces como una posibilidad…
¿Para qué vivir si nadie está a mi lado? ¿Para qué vivir si los demás me oyen, pero no me escuchan?, no les intereso, no valgo la pena… ¿Cuántas veces hemos escuchado eso?... La indiferencia es ver sin actuar; es saber que muchas cosas no funcionan y quedarse sin hacer nada; es ver a otro sufrir y no ayudar; es dejar de desear, de vivir, de disfrutar… es dejar que otros tomen las decisiones por ti, es permitir que alguien te agreda… si no hay nada que perder, ¿por qué no arriesgar? ¿por qué no elegir un camino propio?
Aún no es tiempo de rendirse… si la vida no te da la oportunidad, dátela tú… si la indiferencia de alrededor te quiere alcanzar, la puedes confrontar…
Psic. Adriana García Aguilar.
Supervisora de la Línea UAM.
www.lineauam.uam.mx
http://blogs.eluniversal.com.mx/wweblogs_detalle.php?p_fecha=2011-11-29&p_id_blog=82&p_id_tema=15274

Los golpeadores de mujeres.

Invariablemente todos los días nos enteramos por diversos medios de mujeres muertas, heridas o violentadas física y emocionalmente por sus parejas. No hay semana que no se presenten estos casos, por lo que momento a momento se incrementan las estadísticas de manera drástica.

Hay que decir que el golpeador es un sujeto que tiene una relación directa con la víctima y que tales montos de violencia, se llevan a cabo centralmente en el hogar. En la intimidación que ejercen los hombres hacia las mujeres, definitivamente está explicitado un sentido de poder, dominio y jerarquía. En la mayoría de los casos, es falso el referente que indica que la mujer no sabía que su pareja fuera un hombre violento y agresivo cuando lo conoció. Con base en nuestra experiencia clínica, sabemos que en un alto porcentaje de casos, las mujeres ya tenían antecedentes del agresor con quien tienen una relación emocional pero que, por diferentes razones, se negaron a reconocer tal hecho. Esta negación forma parte del difícil entramado de complicidad emocional que se presenta en las parejas en las que subsiste la violencia.

El agresor ejerce un dominio y poder manifestado desde la descalificación total hacia la pareja, en la cual no existe distinción de edad, nivel socioeconómico o educación, tanto en los golpeadores como para sus víctimas. Ella, vive cotidianamente la violencia doméstica – intrafamiliar; nada como este espacio privado para que ésta se presente.

Una de las motivaciones, no reconocidas por el agresor de mujeres, está justamente en la sexualidad; mediante el cuerpo, el hombre emplea los más diversos recursos para lograr su satisfacción; aquí no importa si la mujer tiene o no deseos e interés sino que se impone el inaplazable deseo del hombre para ejercer de manera forzada el acto sexual, como un hecho de control y autoridad. Acto en el que despliega la mayor presión física y psicológica. El hombre se asume, insistimos, sin que él lo reconozca, como LA AUTORIDAD. Es él quien asume la decisión y tal iniciativa. En gran número de casos, no puede ser pospuesta ya que los agresores presentan un bajísimo umbral de tolerancia. Esto nos remite a un hombre que usualmente tiene serios trastornos depresivos, en los cuales su propia imagen y forma de valorarse suele ser mínima o inexistente.

Si bien la violencia se lleva a cabo por una sorprendente cantidad de hombres, de todas las clases sociales, ésta es encubierta literalmente por la cultura que impone y obliga el silencio de las mujeres, mediante el miedo, la ignorancia, los prejuicios, el dolor, la baja autoestima, las creencias, hábitos y costumbres sociales y grupales que indican erróneamente que los ataques a las mujeres se consideran, piensan y viven como "hechos normales" y que son "parte de la vida de toda mujer".

Reflexionemos sobre el tema y no permitamos que exista una próxima agresión.
Línea UAM, www.lineauam.uam.mx
http://blogs.eluniversal.com.mx/wweblogs_detalle.php?p_fecha=2011-12-06&p_id_blog=82&p_id_tema=15327

12 de diciembre de 2011

Dolores Cacuango, mujer quichua del pueblo kayampi, Ecuador.


 

Mujer quichua del pueblo kayampi que nació el 26 de octubre de 1881, contrajo matrimonio con Rafael Catucuamba el 15 de agosto de 1905, a la edad de veinticuatro años, tuvo nueve hijos, de los cuales solamente tres sobrevivieron; murió el 23 de abril de 1971.

Su padre, Juan Cacuango, y su madre, Andrea Quilo, eran gañanes en San Pablo urco, una parcialidad de la hacienda de Pesillo, (Rodas:23:2005), la más importante propiedad de los frailes mercedarios.

La hacienda y su entorno comunitario fueron el espacio en el cual Dolores Cacuango formó y construyó su pensamiento, su lucha. De la comunidad heredó los referentes culturales, la identidad, la lengua la tradición quichua, el acumulado histórico de las vivencias de sus antepasados que, con seguridad, llegaban a oídos de Dolores.

En su historia de vida, las pocas fotografías que se han logrado recopilar presentan la imagen de una mujer que conserva su indumentaria: sombreros, fachalinas, fajas, polleras de lana y camisas de algodón, elementos que identifican y caracterizan el ser indígena, acción de por sí valiente en épocas y sociedades en donde ser indígena implicaba ser víctima de discriminación, despojo, explotación y abuso. Similar situación ocurría con el conocimiento y uso del idioma, y que en el caso de Dolores, era su principal instrumento de comunicación con sus compañeros de comunidad a quienes guiaba y motivaba a liberarse.

De la comunidad quichua aprendió el conocimiento que manejan los mayores con respecto a la serenidad y el pragmatismo, como elementos claves para garantizar la permanencia y continuidad de la comunidad; aprendió que las personas somos hijos de la Madre Tierra, y en consecuencia nadie tiene derecho a aprovecharse de la tierra, mucho menos abusar de ella, porque hacerlo significa acabar con su fecundidad y con los alimentos que generosamente nos brinda; aprendió sobre la importancia y el valor de la palabra, que debe ser vista como un acto sagrado, como un compromiso que se debe respetar y cumplir, por eso la palabra de Dolores tenía y tiene un alto valor por los mensajes y la energía que logró imprimir en cada una de ellas.

Dolores Cacuango, esa extraordinaria mujer campesina que, "dotada de un juicio y una lucidez moral extraordinarias, se afirma en el camino de su existencia de tal forma que su espíritu por ser incorruptible es casi perfecto, pues establece ante su propia conciencia un juicio claro y definitivo de lo que es la justicia y lucha por llegar a ella como la meta final de su existencia".

Dolores Cacuango ha sido reconocida por el sistema, a pesar de aquellos falsos historiadores que han querido borrar su imagen y el valor de su lucha junto a los campesinos ecuatorianos, para lograr su redención. Dolores Cacuango ha sido calificada por el sistema como Dolores la revoltosa, Dolores la hereje, Dolores la Comunista, Dolores la mujer perseguida, que asistió, en l 931, rodeada de sus tres tiernos hijos, al incendio de su choza, que los patrones lo decidieron, pensando que el fuego podía destruir ese fuego que animaba la lucha del movimiento indígena, que nacía al comienzo de los años treinta, precisamente liderado por esta heroica mujer indígena.

Esta valerosa dirigente nació el 26 de octubre de 1881, en San Pablo Urco, una parcialidad de la hacienda Moyurco, que los frailes mercedarios tenían en el Cantón Cayambe, de la Provincia de Pichincha, junto a otros feudos vecinos que pertenecían a los curas jesuitas y dominicanos; fue hija de Andrea Quilo y de Juan Cacuango, peones conciertos, ella tenía catorce años cuando triunfó la Revolución Liberal. Dolores provenía de los antiguos caciques de la zona y su apellido paterno le daba un ascendiente de prestigio, sin embargo, dos siglos y medio después, debido a las condiciones de trabajo y esclavitud a que habían sido sometidas las familias indígenas, ubicaron a la familia de Dolores Cacuango entre la gente que vivía en extrema pobreza, como todos los peones conciertos de la hacienda agrícola de la Sierra.

El liderazgo de Dolores Cacuango fue indiscutible. Y sus palabras, más que un discurso político, fueron un ariete contra la injusticia y el maltrato a los indígenas. Su liderazgo se impuso sin ninguna duda, manejaba un discurso sencillo y claro, puesto que debía exponer razones y defender planteamientos, ya que llevaba la voz de su pueblo y lo hacía con profundidad, belleza y elocuencia, aquí un ejemplo: "Nosotros somos como los granos de quinua: si estamos solos, el viento nos lleva lejos, pero si estamos unidos en un costal, nada hace el viento, bamboleará, pero no nos hará caer".

Dolores Cacuango siguió una línea de vida intachable, incorruptible, libre de ambiciones personales. Ceder, congraciarse con los patrones, significaba retroceder, entregar la lucha a los enemigos de siempre. Significaba dejar de ser un dique para ellos, para sus futuros y nefastos propósitos.

Las retaliaciones no lograron amedrentarla. Al contrario, templaron más su espíritu rebelde, su fe en la lucha, necesaria para los pueblos indígenas.

Por eso solía decir, tocándose en la mitad del pecho: "Yo, aunque pongan la bala aquí, aunque pongan fusil aquí, tengo que reclamar donde quiera. Tengo que seguir luchando. Para vivir siquiera libertad en esta vida."


http://www.educarecuador.ec/_upload/dolores%20cacuango.pdf

http://www.voltairenet.org/Dolores-Cacuango-pionera-en-la

http://mujeresquehacenlahistoria.blogspot.com/2009/06/siglo-xix-dolores-cacuango.html

http://ecuarunari.org/portal/vernoticias?page=8

http://heroinas.blogspot.com/2011/12/dolores-cacuango-de-ecuador.html?spref=fb

Exigencias del patriarcado en Occidente: "Ser delgada".



 



 

Los modelos culturales que trasmitimos a nuestras adolescentes antes de darles las herramientas para afrontarlos producen estos resultados:

Anorexia Nerviosa : Cerca del 95 % de los enfermos son mujeres

Isabelle Caro (Marsella, 9 de septiembre de 1982 – París, 17 de noviembre de 2010) fue una modelo y actriz francesa que llegó a ser conocida después de ser fotografiada para una controvertida campaña publicitaria llamada "No anorexia".

Sufría de anorexia nerviosa desde los 13 años de edad. Según Isabelle, su enfermedad se debía a una infancia problemática. Cuando apareció en The Insider de CBS, reveló que en el peor momento de sutrastorno alimentario, su peso era de tan sólo 25 kg (55 lb) con una estatura de 1,65 metros (5 pies 5 pulgadas); su peso más reciente fue de 33 kg (73 lb). Su curriculum profesional sostiene que medía 168 cm y pesaba 42 kg en septiembre de 2009.

Fue hospitalizada por primera vez a los 20 años. En 2006 entró en coma, con un peso de sólo 25 kg (55 lb). En esa ocasión el médico dijo que no sobreviviría.

En 2007 protagonizó la campaña de Nolita "No anorexia". Estas imágenes, capturadas por el fotógrafo Oliviero Toscani, que mostraban a Isabelle desnuda, con los huesos de su cara y columna vertebral muy notorios bajo su piel y en general claramente afectada por este trastorno alimentario dieron la vuelta al mundo y se convirtieron en un ícono de estos desórdenes y la lucha de quienes los padecen.

En el programa Supersize vs Superskinny el cual salió al aire el 11 de marzo de 2008, ella admitió su anorexia ante la periodista Anna Richardson.

También fue entrevistada en el segundo episodio de la serie-documental de televisión, El Precio de la Belleza, en la que Jessica Simpson, Ken Pavés y Cobb CaCee, viajan por el mundo para explorar el verdadero significado de la belleza. Caro habló de cómo se convirtió en anoréxica y advirtió a otras chicas acerca de esta aflicción a lo que Jessica respondió: «Lo que estás haciendo en este momento te hace más hermosa y espero que las mujeres de todo el mundo conozcan esta historia y lo importante que es saber que lo delgada que estás no es lo que te hace hermosa».

Origen De La Anorexia
Su causa es desconocida, pero hay una serie de factores causantes de la anorexia que son una combinación de elementos biológicos (predisposición genética y biológica), psicológicos (influencias familiares y conflictos psíquicos) y sociales (influencias y expectativas sociales). La pérdida de peso conduce a la malnutrición, que a su vez contribuye a los cambios físicos y emocionales del paciente y perpetúa el círculo vicioso que se sintetiza en el modelo psicosocial de la anorexia nerviosa.




La vulnerabilidad biológica de la adolescencia y los problemas familiares y sociales pueden combinarse con un clima social determinado para originar la conducta alimentaria típica de los anoréxicos. La sociedad occidental está muy influenciada por la noción de que la obesidad es insana y poco atractiva, mientras que se percibe la delgadez como algo deseable.

La mayoría de los niños prepúberes tiene conciencia de esta actitud social, y se calcula que cerca del 50 % de la niñas prepúberes siguen una dieta o adoptan medidas de control de su peso. Cerca del 95 % de los enfermos son mujeres. En zonas donde existe escasez de alimentos es prácticamente desconocida.

Consiste en una alteración grave de la percepción de la propia imagen, con un temor morboso a la obesidad, lo que condiciona una alteración.

Las principales características de la anorexia nerviosa son el rechazo a mantener un peso corporal mínimo, un miedo intenso a ganar peso y una alteración significativa de la percepción del cuerpo. Las mujeres afectadas por este trastorno sufren, además, amenorrea (falta de regla) aunque hayan pasado la menarquía (primera regla).

Generalmente la pérdida de peso se consigue mediante una disminución de la ingesta total de alimentos. Aunque los anoréxicos empiezan por excluir de su dieta todos los alimentos con alto contenido calórico, la mayoría acaba con una dieta muy restringida, limitada a unos pocos alimentos. Existen otras formas de perder peso, como la utilización de purgas, vómitos provocados o ejercicio físico excesivo.

En la anorexia nerviosa se distinguen dos subtipos:

el tipo restrictivo

el compulsivo purgativo.

El primero describe cuadros clínicos en los que la pérdida de peso se consigue con dieta o ejercicio intenso, mientras que el segundo se utiliza para identificar al individuo que recurre regularmente a atracones o purgas.

En el tipo restrictivo los pacientes con anorexia nerviosa no recurren a atracones ni purgas, mientras que en el compulsivo purgativo algunos no presentan atracones pero si recurren a purgas incluso después de ingerir pequeñas cantidades de comida.

http://es.wikipedia.org/wiki/Isabelle_Caro

http://www.tuotromedico.com/temas/anorexia.htm

http://vistiendote.com/noticias/la-muerte-de-isabelle-caro-y-la-triste-problematica-de-la-anorexia-y-la-moda/
http://pa-fuera-telaranas.blogspot.com/2008/10/ana-carolina-reston-otra-victima.html

http://mujerdelmediterraneo.blogspot.com/2011/12/estar-delgada-12-exigencias-del.html?utm_source=feedburner&utm_medium=email&utm_campaign=Feed%3A+MujerDelMediterraneo+%28mujer+del+mediterraneo%29

10 de diciembre de 2011

Los Derechos humanos y las mujeres.

En la historia de la Declaración Universal de los Derechos Humanos hay un nombre propio: el de Eleanor Roosevelt, feminista y activista social. Presidió, el comité que aprobó la Declaración Universal de los Derechos Humanos, fue su máxima impulsora. Se la considera una de las mujeres más influyentes del Siglo XX. Eleanor Roosevelt y Minerva Bernardino lograron que la Declaración Universal de Derechos del Hombre fuera Derechos Humanos en 1948.

Los Derechos Humanos y las mujeres

¿Qué habría sido de la aplicación de los Derechos Humanos a todos los seres humanos, sin la influencia y la lucha de los movimientos feministas? Gran parte de las modificaciones sobrevenidas en las costumbres sociales y la evolución política de las sociedades no habrían tenido lugar sin el despliegue de esfuerzos, reflexión y reivindicación de las mujeres a lo largo de la historia.

Como lo demuestran los acontecimientos de la Historia, el hecho de hablar de Derechos Humanos ha sido fuertemente ligado al concepto de varón, como paradigma de lo humano.

El lenguaje utilizado en los distintos documentos, las ideas, valores y costumbres que éstos reflejan, consolida un modelo de sociedad patriarcal en el que se ignora la manera de sentir y de pensar o de situar los valores de la otra parte de la humanidad, haciéndola invisible: la mirada de las mujeres.

Los movimientos feministas intentarán quebrar esta situación de desigualdad a través de su lucha por los derechos... a la integridad física al trabajo a la educación a la cultura al acceso al poder a una vida sexual y reproductiva plena y sana a conservar nuestros ingresos a acceder al derecho de propiedad y a los créditos bancarios a ser tratadas con dignidad

… que nos permitirán gozar, en igualdad de condiciones y oportunidades, de los mismos derechos de los que gozan los hombres, por el simple hecho de serlo.

Los distintos movimientos de mujeres a nivel mundial han continuado la labor de promoción y vigencia efectiva de nuestros derechos y libertades fundamentales, luchando por una reformulación global de los Derechos Humanos con perspectiva de género

Si bien es cierto que el reconocimiento de los derechos humanos comprende de manera general al hombre y a la mujer, no menos cierto es que la realidad práctica evidencia que los instrumentos internacionales y los mecanismos de derechos humanos invisibilizan las necesidades, deseos y demandas de las mujeres, ya que tales instrumentos no toman en cuenta sus especificidades porque sus derechos son sistemáticamente violados: además de ser victimizadas por ser mujeres, deben encajar las injusticias sin que sean consideradas una violación de sus derechos.

¿Qué habría sido de la aplicación de los Derechos Humanos a todos los seres humanos, sin la influencia y la lucha de los movimientos feministas? Gran parte de las modificaciones sobrevenidas en las costumbres sociales y la evolución política de las sociedades no habrían tenido lugar sin el despliegue de esfuerzos, reflexión y reivindicación de las mujeres a lo largo de la historia

La perspectiva de género de los Derechos Humanos

La perspectiva de género nace de esa percepción diferente de la realidad, cuando exige que se tengan en cuenta las necesidades específicas del 50% de la población que representan las mujeres.

El logro más visible del género femenino es el de haber colocado lo referente a la mujer y sus necesidades específicas en la agenda de las grandes conferencias mundiales.

Los derechos de la mujer están teóricamente y formalmente recogidos en el concepto general de Derechos Humanos y sin embargo, a pesar de que muchos Estados hayan firmado los acuerdos, convenios y tratados en pro de la igualdad, las cuestiones específicas relacionadas con las mujeres reciben una consideración distinta, un tratamiento inferior y marginal.

Es importante destacar la necesidad de hablar de los derechos de la mujer desde una perspectiva feminista de la historia.

Para comprender esto mejor, basta señalar por ejemplo, que la Declaración de los Derechos Humanos proclamada en 1948, para definir los derechos humanos de la persona, tomó como base el término genérico "hombre" que si bien incluye a la mujer, no la define como ser distinto con necesidades específicas

Fue en la Conferencia Mundial de Derechos Humanos, celebrada en Viena en 1993, cuando la comunidad internacional declaró que los derechos humanos de la mujer y de la niña son parte inalienable, integrante e indivisible de los Derechos Humanos universales. También empezaron a utilizarse los términos de "indivisibilidad" de los derechos, y "universalización absoluta" de los mismos, no sólo desde una perspectiva jurídica sino también desde un concepto moral y político, como objetivo a alcanzar a largo plazo.

La evolución de las mentalidades ha sido lenta por el simple hecho de que los documentos, tratados y convenios fueran elaborados en foros constituidos mayoritariamente por hombres, representantes de un modelo ideológico patriarcal muy alejado de nuestras forma de vivir y de representar el mundo.

Derechos Humanos, mujer y violencia, conceptos estrechamente vinculados

Ha sido la presión de los grupos de mujeres organizadas la que ha logrado situar a la violencia contra la mujer, históricamente considerada como un hecho de ámbito privado, entre los puntos fundamentales de denuncia en relación a la violación de los derechos de las mujeres y uno de los ejes de debate prioritarios en numerosas conferencias internacionales.

El reconocimiento de que han prevalecido los modelos masculinos de poder ha hecho aflorar la "otra mirada": la mirada femenina, capaz de equilibrar la representación del mundo, hasta ahora determinada por los varones.

http://www.escueladefeminismo.org/spip.php?article465

http://heroinas.blogspot.com/2011/03/eleanor-roosevelt-heroina-de-estados.html?spref=fb

6 de diciembre de 2011

Las beguinas: libertad en relación.

Entre los siglos XI y XIV el occidente medieval vivió toda una serie de transformaciones de carácter sociocultural, económico y espiritual que nos permiten connotar este período de apasionante. Dentro del ámbito de la espiritualidad estas transformaciones tuvieron como protagonistas a laicos y laicas de todos los estratos sociales. Ellos y ellas protagonizaron una auténtica rebelión contra el poder establecido y, por tanto, contra la Iglesia a la cual acusaban de tener un gran poder temporal, alejándose de los ideales evangélicos, y de excluirlos "a priori", precisamente por su condición laica, de la vida\"religiosa", reduciéndolos a un universo puramente material. Una lucha que se enmarca en un contexto religioso y cristiano porque religiosa y cristiana es la sociedad occidental medieval. Buscaron formas de vida que les permitieran conciliar una doble exigencia: la de una vida consagrada al servicio de Dios y la de cristianas y cristianos que viven en el siglo al margen de la estructura eclesiástica.
Esta actitud, que dio lugar a una gran proliferación de movimientos de renovación espiritual, dentro y fuera de la ortodoxia, comportó una ruptura con el orden establecido por la Iglesia; una ruptura que para las mujeres fue doble: en tanto que laicas y en tanto que mujeres. En tanto que mujeres porque desde el punto de vista teológico –pero también desde el médico y científico- eran consideradas fisiológica y espiritualmente débiles, defectivas en cuerpo y fortaleza moral e incapaces –salvo muy pocas excepciones- de elevarse a la consideración de la realidad espiritual. A pesar de estas opiniones la presencia de las mujeres prevaleció en todos estos movimientos e, incluso, crearon una corriente de espiritualidad desde ellas y para ellas, con una total autonomía respecto a los hombres. Una corriente de espiritualidad que ellas dotaron de tanta fuerza y potencia que influyeron, no solamente la mística de su tiempo, sino la de siglos posteriores: nos estamos refiriendo a las beguinas.
El de las beguinas es un movimiento que nace a finales del siglo XII en un ámbito geográfico concreto, Flandes –Brabante– Renania, que se extiende con rapidez hacia el norte y el sur de Europa, y en cuyo seno encontramos mujeres de todo el espectro social cuyo deseo es el de llevar una vida de espiritualidad intensa, pero no de forma claustral, como estaba sancionado socialmente, sino plenamente incardinadas en las ciudades entonces emergentes.
La necesidad de un espacio específicamente femenino, creado y definido por las mismas mujeres, fue sentida y expresada literariamente por Cristina de Pizán a principios del siglo XV en "El libro de la Ciudad Damas", en el cual ella imagina la construcción de una ciudad, sólida e inexpugnable, habitada sólo por mujeres. Pero pocos siglos antes las mujeres llamadas beguinas habían materializado ya la existencia de un espacio similar al imaginado por Cristina.
Reclusión, beguinato o beaterio son algunos de los nombres que designan este espacio material en el que habitan las beguinas o reclusas (con ambos nombres son conocidas estas mujeres en Cataluña) y que puede adoptar formas y dimensiones diversas, ya que puede tratarse de una celda, una casa, un conjunto de casas o una auténtica ciudad dentro de la ciudad, como los grandes beguinatos flamencos, declarados Patrimonio de la Humanidad el año 1998.
Todos ellos, sin embargo, representan una misma realidad: un espacio que no es doméstico, ni claustral, ni heterosexual. Es una espacio que las mujeres comparten al margen del sistema de parentesco patriarcal, en el que se ha superado la fragmentación espacial y comunicativa y que se mantiene abierto a la realidad social que las rodea, en la cual y sobre la cual actúan, diluyendo la división secular y jerarquizada entre público y privado y que, por tanto, se convierte en abierto y cerrado a la vez. Un espacio de transgresión a los límites, tácitos o escritos, impuestos a las mujeres, no mediatizado por ningún tipo de dependencia ni subordinación, en el que actúan como agentes generadores de unas formas nuevas y propias de relación y de una autoridad femenina. Un espacio que deviene simbólico al erigirse como punto de referencia, como modelo, en definitiva, para otras mujeres.

El fenómeno de laicización de la religión, que se produjo a partir del siglo XII, hizo que los clérigos dejaran de detentar el monopolio del papel de intermediarios con lo divino. Un papel que empiezan a compartir con aquellas personas seglares a las que la sociedad reconoce una especial autoridad.
En toda Europa, las beguinas recibieron numerosos legados testamentarios para que cumplieran una serie de tareas relacionadas con la muerte y con el tránsito del alma hacia el Más Allá. Así, ellas rezaban por la salvación del donante, participaban en los funerales y acompañaban el cuerpo del difunto al cementerio. Pero también tenían cuidado del cuerpo del moribundo, lo velaban y amortajaban. Esta mediación en la muerte se convirtió en una de sus principales actividades y les otorgó una función social que las convertía en imprescindibles.
El cuidado del cuerpo de enfermos y moribundos que las beguinas realizan constituye una práctica espiritual que está íntimamente vinculada a la compasión y a la solidaridad.
Las beguinas encarnan una de las experiencias de vida femenina más libre de la historia. Laicas y religiosas a la vez, vivieron con una total independencia del control masculino –familiar i/o eclesiástico- y la libertad de que gozaban es inseparable de la red de relaciones que establecen: de forma primaria entre ellas, con Dios "sine medio", y con el resto de mujeres y hombres de las ciudades donde vivían.
La forma de vivir y entender el mundo de estas mujeres se extendió con rapidez por toda Europa occidental hasta convertirse en un auténtico movimiento, tanto por el número de mujeres que se adhirieron a él como por el amplio espectro social al que pertenecían. Un movimiento que se movió siempre en los tenues límites que a menudo separan la ortodoxia de la heterodoxia.
El espacio de libertad que ellas representan las sitúa en un "más allá" del orden socio-simbólico patriarcal en su forma medieval, trascendiendo su estructuración binaria y jerarquizada. Generan algo nuevo y, en consecuencia, no previsto en la cultura de la época. Original, porque ellas son el origen. Un espacio que se radica materialmente en las casas que habitan, inmersas en el tejido de la ciudad, con el que interaccionan de forma constante, ofreciendo tanto en la vida como en la muerte, su mediación.

http://www.ub.edu/duoda/diferencia/html/es/secundario1.html
Elena Botinas Montero y Julia Cabaleiro Manzanedo.

5 de diciembre de 2011

Los derechos humanos, son respetados?

Los Derechos Humanos son derechos inalienables y pertenecientes a todos los seres humanos. Estos derechos son necesarios para asegurar la libertad y el mantenimiento de una calidad de vida digna, y están garantizados a todas las personas en todo momento y lugar."

Dada la naturaleza del ser humano, todos deberíamos ser iguales y disfrutar de los bienes, servicios, recursos y gozar de los derechos humanos en igualdad de condiciones.

Sin embargo, aspectos como la fuerza, la inteligencia, la capacidad económica, la habilidad política, los valores etc. ha originado distintos grados de poder, lo que en el transcurso del tiempo se ha ido polarizando hasta llegar a las sociedades actuales, en las que esas diferencias son más evidentes y lesivas respecto de quienes no detentan el poder.

Los Derechos Humanos son aquellos que cada hombre y cada mujer tiene, por el solo hecho de serlo. Por ende cada ser humano en virtud de su dignidad posee una serie de de derechos fundamentales inherentes a su calidad humana, que le son universalmente conocidos.

Derechos Humano de Primera Generación: Destinados a garantizar la integridad física del cuerpo: Derecho a la Vida, la prohibición de la tortura, de la esclavitud, la condena al apartheid y de cualquier tipo de discriminación etc.

Los Derechos Humanos surgen con la Revolución francesa como rebelión contra el absolutismo del monarca. Imponen al Estado el deber de respetar siempre los derechos fundamentales del ser humano:

- A la vida

- A la integridad física y moral

- A la seguridad personal

- A la igualdad ante la ley

- A la libertad de pensamiento, de conciencia y de religión.

- A la libertad de expresión y de opinión.

- De residencia e inviolabilidad del domicilio.

- A la justicia

- A una nacionalidad

- A contraer matrimonio y fundar una familiar

- A participar en la dirección de asuntos políticos

- A elegir y ser elegido a cargos públicos.

- A formar un partido o afiliarse a alguno.

- A participar en elecciones democráticas.

Derechos Humanos de Segunda Generación: Relacionados con la integridad y manifestación del espíritu: La libertad del pensamiento, de conciencia, de opinión, de reunión, de religión, de expresión, a la educación, a la igualdad, la protección de las minorías, el libre acceso a la cultura.

Ø Derechos Económicos:

- A la propiedad

- A la seguridad económica.

Ø Derechos Sociales:

- A la alimentación,

- al trabajo,

- a la seguridad social,

- a la salud,

- a la vivienda,

- a la educación.

Ø Derechos Culturales:

- A participar en la vida cultural del país,

- a gozar de los beneficios de la ciencia,

- a la investigación científica, literaria y artística.

Derechos Humanos de Tercera Generación: Derecho a disponer de medios para poner en práctica los anteriores: Igualdad ante la ley, la irretroactividad en materia penal, el derecho a participar directa e indirectamente en el gobierno, a acceder en condiciones de igualdad a las funciones públicas, a votar y ser elegido.

- A la paz

- Al desarrollo económico

- A la autodeterminación

- A un ambiente sano

- A beneficiarse del patrimonio común de la humanidad

- A la solidaridad

http://mujerdelmediterraneo.blogspot.com/2011/11/derechos-humanos.html?utm_source=feedburner&utm_medium=email&utm_campaign=Feed%3A+MujerDelMediterraneo+%28mujer+del+mediterraneo%29

1 de diciembre de 2011

Violencia simbólica institucional y politica.



 Las instituciones democráticas actuales, las administraciones públicas, los partidos políticos y los sistemas empresariales están construidos sobre modelos políticos de finales del S.XIX y principios del S.XX, por tanto son espacios masculinos basados en el ejercicio del poder piramidal.La participación de las mujeres en las estructuras institucionales tiene aristas, que van haciendo difícil el recorrido a través de "lo político", transitar entre los mecanismos ya establecidos de participación en las instituciones, partidos, empresas, etc., presenta una dificultad añadida para las mujeres pues son estructuras androcéntricas creadas para servir a los intereses de un grupo de ciudadanos, varones, y representantes de una burguesía emergente.

Esta cultura de relación androcéntrica permanece en el espíritu y en las formas de las organizaciones actuales mostrando una gran incapacidad para reformarse adaptándose a las nuevas realidades sociales, lo que explica parte de su debilidad actual, en este rígido panorama irrumpen las mujeres aumentando poco a poco su presencia pública y representatividad.

Espacio marginal para las mujeres

Las organizaciones no cambian ante esta nueva circunstancia que representan las mujeres en las organizaciones, tan sólo aceptan su presencia al principio minoritaria, pero que pronto pasa de ser algo anecdótico a plantear la exigencia democrática de la paridad, desde los años 70 las mujeres reclaman la mitad del cielo y la mitad de la tierra. Se abre un escenario de tensión con nuevas actoras que reclaman espacio, autonomía y poder, mientras tanto los hombres que hasta ahora ocupaban todo el espectro, les ofrecen espacio marginal, tutela, y poder demediado.

Los partidos políticos nombran a los cuadros ejecutivos responsables de las instituciones, organismos y administraciones públicas para poder gobernar y desarrollar sus programas electorales, llevando su diseño del ejercicio del poder a estos espacios y trasladando la cultura interna de los partidos al ámbito institucional.

Violencia simbólica

Es en este traslado de modelos y cultura organizacional, donde se reproduce lo que podemos llamar violencia simbólica sobre las mujeres en las instituciones, y como se manifiesta en los distintos aspectos de la cultura y la vida interna de las instituciones.

l. Cultura interna de las organizaciones, configurada en base a unos criterios que son imposibles de cumplir por las mujeres. Es la idea de cultura interpretada como el conjunto de experiencias, hábitos, costumbres, creencias y valores que caracteriza a una organización. Los valores de la organización desarrollan normas, guías y expectativas que determinan los comportamientos apropiados en situaciones particulares y el control del comportamiento de los miembros de la organización de unos con otros, así como los "supuestos implícitos y explícitos" que los miembros tienen respecto de cuál es el comportamiento legitimo dentro de la organización. Es sobre todo en estos supuestos no explícitos dónde se produce la quiebra de las oportunidades para las mujeres dentro de las organizaciones.

2. Cultura interna del denominado mérito y capacidad. Depende de relaciones informales, en las cuales no estamos las mujeres porque estamos trabajando y donando tiempo, para que otros se relacionen informalmente. Los datos en este sentido son abrumadores como se refleja en multitud de estudios realizados sobre el tiempo de las mujeres, cabe destacar "La contabilidad del tiempo" realizado por Mª Ángeles Durán y su libro "El valor del tiempo", o el trabajo de Soledad Murillo en "El mito de la vida privada" en los que se muestra claramente la aportación informal de las mujeres a la vida.

El resultado habitual es que las mujeres tienen mejores currículums de partida pero les resulta difícil mantener una carrera profesional ascendente, pues las oportunidades exigen presencia asidua en los espacios informales.

En este sentido es muy importante aludir a los espacios de ocio en los que se entablan redes de confianza y en los que las mujeres suelen estar excluidas por motivos de horarios y de complicidad, campeonatos de padel, de golf, gimnasios compartidos, copas al salir de los despachos.

En estos espacios informales, se consolidan los supuestos no explícitos de los que hablamos y se establecen las alianzas personales, que van siempre más allá de los procesos formales de reparto de poder o responsabilidades.

3. La violencia que se ejerce contra las mujeres, cuando se prescinde de ellas en las instituciones, y no se requiere contentarlas. Es habitual en las organizaciones políticas el cambio de responsabilidades en las mujeres, que actúan como moneda de cambio entre "los varones de los partidos" Podríamos hablar de las "damnificadas" de la política, frente a los compensados de la política, siempre en cargos relevantes y después jubilados como consejeros de grandes empresas privadas con altos sueldos. Son mujeres que todas conocemos, y podemos sustituir su nombre por muchas otras, que sabemos que les ha pasado algo similar.

SIEMPRE, ELLOS

Cuando venden políticamente la necesidad de renovarse, siempre es un anuncio de que las mujeres van a sufrir en las listas, las renuevan para demostrar que se mejoran las listas, aunque permanecen los mismos de siempre, es decir, ellos.

E-Mujeres - Por Mª Angustias Bertomeu
http://www.wim-network.org/2011/11/violencia-simbolica-institucional-en-clave-de-genero/
http://www.wim-network.org/

La agresividad en la pareja.



Las relaciones de pareja, inicialmente basadas en el amor y en la atracción física, con frecuencia evolucionan hacia un modelo de lucha jerárquica en la que predomina la agresividad. El objetivo de esta tertulia es detectar los orígenes y causas de esa agresividad y encontrar soluciones prácticas para erradicarla o, al menos, mantenerla en niveles soportables.


Antes de entrar en el tema quisiera definir los dos términos relacionados en el mismo: pareja y agresividad.
Hay varias clases de parejas, pero yo me voy a referir sólo a la unión de un hombre y una mujer por amor, con voluntad de permanencia y el deseo de formar una familia.
La agresividad se define como un estado emocional que consiste en sentimientos de odio y deseos de daño a otra persona, animal u objeto.
Desgraciadamente, por más que una pareja trate de llevar una relación muy equilibrada, siempre surgirán diferencias y conflictos. Son dos las razones fundamentales que, a mi entender, dan lugar a estas tristes situaciones. La primera sería la diferente estructura cerebral del hombre y la mujer. Esto hoy día es un dato científico incuestionable. Se sabe que el cerebro de la mujer está más desarrollado en el aspecto emocional y en un sentido práctico de las cosas, mientras el hombre es más abstracto y lógico. El otro factor a tener en cuenta es que son dos personas con diferentes mundos, los cuales representan la historia de sus familias de origen, las experiencias de lo que han vivido, de lo que han experimentado con otras personas, de cómo se han ido sintiendo a lo largo del proceso de su propia vida. Además a estos factores hay que añadir las creencias, ideas, gustos, etc. etc.
Ahora bien, ¿por qué esas diferencias y conflictos terminan generalmente en peleas y discusiones? Yo creo que esto ocurre cuando se quiere imponer el criterio de uno, cuando no se sabe negociar, por mala comunicación o por tener una expectativa diferente de lo que el otro hace.
Pero como a pesar de todo, para cumplir nuestro fin último y fundamental como seres vivos de multiplicarnos y continuar la especie, debemos compartir nuestra vida como pareja del mejor modo posible, teniendo como base que somos seres distintos y que se debe respetar al otro, pues sin este respeto se acaba el amor y la pareja.
Algunos consejos para evitar la agresividad serían:

A) Identificar el problema.
B) Discutir en un lugar y momento adecuado.
C) Aprender estar en desacuerdo sin pelear.
D) No buscar culpables, sino soluciones
E) Centrar la discusión en el problema, no en la persona.
F) No pretender tener la razón. Ser tolerante.

Creo que cuando valoramos, aceptamos y respetamos a la persona que amamos y no queremos imponer nuestro criterio, tenemos la posibilidad de vivir en armonía y pacíficamente.

http://tertuliafilosoficatoledo.blogspot.com/2007/05/la-agresividad-en-la-pareja.html

Yo cuido, tu cuidas, ¿él cuida?

Las vidas de las mujeres de América Latina de distintas clases sociales se entrelazan en complejas madejas de negociaciones y pactos para poder enfrentar cada día, mantener un trabajo que mejore su calidad de vida y al mismo tiempo criar a sus hijos e hijas o a sus propios padres ya mayores y familias en general.
Si las familias tienen cubiertas por parte del Estado o de las empresas -plantea este informe- las necesidades de cuidado, esto redundará en una mejor calidad de su trabajo, y las economías nacionales y regionales verán reducida su pobreza por la mayor participación femenina en el mercado laboral. Varias experiencias y estudios dan cuenta de ello.
Sonia G es paraguaya. Hace 10 años que vive en Argentina, trabajando en el servicio doméstico. Desde hace nueve viaja todos los días desde la villa de Barracas,al sur de la ciudad de Buenos Aires (C.A.B.A), capital de Argentina, hasta el barrio de Caballito del centro de la ciudad para cuidar los hijos de una investigadora y limpiar su casa.
Durante años hizo ese trabajo sin mayores problemas pero cuando tuvo su primera hija el panorama cotidiano se le complicó. Como indica la ley del país, no tuvo licencia por maternidad pagada, dependió de la buena voluntad de su jefa; quien a su vez no sabía cómo reemplazar a esa mujer con la que sus hijos estaban tan encariñados.
Finalmente Sonia volvió a trabajar y dejó a su bebé al cuidado de una prima llegada de Paraguay en busca de un mejor destino también. Pero su prima consiguió un trabajo mejor pagado, y ya no pudo cuidar a su hija. Entonces su jefa la apoyó para que pudiera anotar a su hija en un jardín cerca del trabajo, lo que le facilitó un poco las cosas.
Como la de Sonia, las vidas de las mujeres de América Latina de distintas clases sociales se entrelazan en complejas madejas de negociaciones y pactos para poder enfrentar cada día, mantener un trabajo que mejore su calidad de vida y al mismo tiempo criar a sus hijos e hijas o a sus propios padres ya mayores y familias en general.
Todo esto porque mientras las mujeres se insertaron en el mundo laboral, no se produjo en nuestras sociedades un avance de la misma magnitud en pos de lograr la igualdad en la distribución familiar de las tareas de la casa y los cuidados de niños, enfermos o ancianos, tanto mujeres como varones.
Tampoco los Estados se han hecho responsables de cubrir este déficit con normativa y políticas públicas eficaces. Las empresas han hecho tímidos esfuerzos por mejorar las condiciones laborales pero, en general, se han restringido a programas destinados a mujeres embarazadas y en periodo de puerperio, enmarcando las necesidades en periodos concretos relacionados con el nacimiento del bebé.
El nudo sigue siendo considerar que las mujeres son ’naturalmente’ las únicas responsables de los cuidados y la organización familiar, aún a pesar de que la familia tradicional con el hombre como único proveedor está en franco declive. Así como desconocer que si las familias tienen cubiertas por parte del Estado o de las empresas las necesidades de cuidado, esto redundará en una mejor calidad de su trabajo, y las economías nacionales y regionales verán reducida su pobreza por la mayor participación femenina en el mercado laboral. Varias experiencias y estudios dan cuenta de ello.
El cambio se ha puesto en marcha. Falta profundizarlo y hacerlo universal.
http://www.amecopress.net/spip.php?article7240

Día Mundial del Sida.

1 de diciembre, se celebra el Día Mundial del Sida. Se cumplen además 30 años de la notificación de los primeros casos de sida. Tres décadas de aprendizaje y trabajo para detener una epidemia que parecía en sus inicios ser incontrolable. Los datos muestran que los nuevos casos de infección disminuyen y que la respuesta ante la enfermedad avanza. Sin embargo, en todas las regiones, la estigmatización, la discriminación y la violencia afectan a las mujeres de manera desproporcionada y socavan los progresos realizados.

Según ONUSIDA, las nuevas infecciones de VIH en 2010 muestran una disminución del 21 por ciento desde 1997, casi la mitad de los que lo necesitan tienen acceso al tratamiento y el número de muertes relacionadas con el SIDA pasó de un máximo de 2,1 millones en 2004 a alrededor de 1,8 millones en 2009. Hay que alegrarse por este progreso que no hubiera sido posible sin los esfuerzos combinados de los gobiernos, las organizaciones de la sociedad civil, el sector privado y las Naciones Unidas.

Actualmente, las mujeres representan el 50 por ciento de los 34 millones de personas que viven con VIH. En dos regiones – África subsahariana y el Caribe – las mujeres componen la mayoría de los adultos que viven con VIH: 59 por ciento en África subsahariana y 53 por ciento en el Caribe. En América Latina, las mujeres representan el 36 por ciento de las personas adultas que viven con VIH. En Europa oriental y en Asia central, cada vez más mujeres están siendo infectadas a medida que la epidemia progresa en la región. En Ucrania, por ejemplo, se estima que el 45 por ciento de personas que vivían con VIH en 2009 eran mujeres, mientras que en 1999 eran el 37 por ciento.

Frente a esta situación, Michelle Bachelet, directora ejecutiva de Onu Mujeres, ha advertido que para alcanzar la "meta cero nuevas infecciones de VIH, cero discriminaciones y cero muertes relacionadas con el Sida" se requiere "cero discriminación contra las mujeres y las niñas". En concreto, Bachelet propone "alinear la respuesta al VIH con las estrategias de desarrollo más globales enfocadas sobre la igualdad de género".

Perspectiva de género

"Hay que centrarse en las mujeres y niñas", advierte en su mensaje para este Día Mundial del Sida. Hoy, menos de la mitad de los países tienen un presupuesto específico para las actividades en materia de VIH relacionado con las mujeres. Llegar a cero requerirá la plena participación de las mujeres en los planes nacionales de lucha contra el Sida, y una financiación adecuada para atender las necesidades y las prioridades de las mujeres.

"Onu Mujeres se ha comprometido con el progreso en estas importantes áreas. Si hacemos escuchar las voces de las mujeres seropositivas, si aseguramos su liderazgo y participación en la toma de decisiones y si integramos la igualdad de género en los planes y presupuestos nacionales relacionados con el VIH, nos acercaremos a la meta cero nuevas infecciones por VIH, cero discriminaciones y cero muertes relacionadas con el Sida".

Mayor vulnerabilidad

Las mujeres son más vulnerables a resultar infectadas por el VIH. De hecho, tienen al menos dos veces más probabilidades de infectarse que los hombres en las mismas relaciones sexuales practicadas sin protección, debido a que la mucosa vaginal es más frágil y existe más superficie de contacto, y a que el semen tiene mayor capacidad infectiva que los fluidos vaginales. Además, las enfermedades de transmisión sexual, muchas de ellas asintomáticas y por lo tanto no percibidas por la mujer, favorecen la infección.

Al margen de las cuestiones puramente biológicas, son las circunstancias sociales y culturales las que provocan mayor desprotección entre las mujeres. En ocasiones, ven limitada su capacidad para ejercer el control sobre su salud sexual, debido a una diferenciación de roles masculino y femenino basada en un reparto inequitativo de poder.

Algunas mujeres pueden encontrar difícil rechazar una práctica de riesgo o negociar el uso de un preservativo por miedo a las represalias o temor de ser rechazada por su pareja. Estas circunstancias se agravan profundamente cuando se produce un maltrato.

Esta mayor vulnerabilidad va unida en los países de ingresos bajos y medios con más fuerza aún a factores sociales y culturales. Los roles de género que conducen a relaciones de poder desequilibradas y la violencia sexual directa sobre las mujeres son claros agravantes, más visibles aún en zonas marginales y en condiciones de vida de pobreza.

La falta de acceso a los servicios, las diferencias de poder económico y jurídico entre hombres y mujeres, la coacción sexual y la violencia limitan también la capacidad de las mujeres y las niñas a ejercer sus derechos. El estigma y la discriminación afectan desproporcionadamente a las mujeres y las niñas, que tienen menos probabilidades de tener acceso a los servicios, revelar que son seropositivas o negociar prácticas sexuales más seguras por temor a ser maltratadas, rechazadas o víctimas de la violencia.

La pérdida de salud no es la única adversidad a la que tendrán que enfrentarse las mujeres de las poblaciones más desfavorecidas. En estos países, además, son las mujeres quienes se ocupan de cuidar a las personas enfermas. Mujeres y niñas pagan por esta lacra perdiendo la oportunidad de participar en la generación de ingresos y en la educación, hipotecando su futuro.

Hace falta mucha más investigación para entender y esclarecer la especial vulnerabilidad de las mujeres frente al VIH, y poder así generar estrategias para combatirlo. La lucha contra la expansión del virus pasa por el empoderamiento de las mujeres.


http://www.amecopress.net/spip.php?article8377

 

 

 

30 de noviembre de 2011

Inmigrantes centroamericanas víctimas de explotación sexual.

Leonora Gámez, una nicaragüense de 35 años, es obligada a prostituirse por unos cuatro dólares en un bar de la frontera del sur de México, donde la explotación sexual de indocumentadas centroamericanas es un problema social en expansión.
Esta morena bajita, que aparenta más edad, cayó atrapada en las redes de prostitución que operan en la zona cuando hace unos años dejó Nicaragua, el segundo país más pobre de América Latina después de Haití, con la intención de llegar a Estados Unidos, buscar un trabajo y prosperar.
Pero hoy trabaja de mesera en una cantina de Ciudad Hidalgo, en el sureño estado mexicano de Chiapas, donde le pagan 50 pesos mexicanos por cliente, un "servicio" sexual que dice le impuso la dueña del negocio como "requisito" para no denunciar su condición de indocumentada ante las autoridades migratorias mexicanas.
"Después de cinco años ya me acostumbré, a principios me daba asco, pero luego lo vi como un trabajo", dice Gámez a la AFP en una calle de Ciudad Hidalgo, mientras camina hacia la balsa que la llevará -ilegalmente- a la vecina ciudad guatemalteca de Tecún Umán a comprar provisiones y "buscar algún cliente".
Los prostíbulos pululan en Ciudad Hidalgo, adonde los inmigrantes indocumentados de Centroamérica y de otros países llegan tras cruzar el río Suchiate en balsas construidas con tablas y neumáticos.
Según el fiscal de Migrantes de Chiapas, Enríque Méndez, la explotación sexual de inmigrantes en Ciudad Hidalgo y otras ciudades del estado como Tapachula es un problema que tratan de resolver, pero se dificulta pues muchas víctimas no denuncian su caso ante las autoridades por temor a represalias.
La fiscalía ha consignado desde 2009 a poco más de 10 tratantes de personas, lo cual es considerado mínimo por defensores de derechos humanos que hablan de una "expansión" del problema.
"Si no tenemos esas denuncias, poco se puede hacer; pero aun así se hacen los esfuerzos que las mismas leyes nos permiten para contrarrestar estos casos que están fuera de la ley, no se puede permitir ni la explotación ni la trata de personas", dijo Méndez a la AFP.
Maritza Montes, una salvadoreña de 25 años, logró salir de la prostitución pero nunca denunció su situación. Era obligada a prostituirse por unos 15 dólares con la clientela de camioneros o choferes de autobuses de un bar de Tapachula, donde trabajó dos meses.
"Un coyote (traficante de indocumentados) con mentiras me dijo que mientras nos llegaba el día de seguir el camino hasta la capital de México me iba conseguir un empleo temporal y que así podía ganar unos pesos, pero lo que hizo fue llevarme a un bar donde me obligaron a trabajar vendiendo mi cuerpo", narró a la AFP.
Fue "horrible", dos meses "tortuosos", recuerda la joven, quien hace un año vive en Comitán de Domínguez (Chiapas), tras abandonar Tapachula junto a una hondureña que también era explotada en el mismo bar.
Muchas son menores de edad, humilladas, maltratadas, violadas, algunas llegan desde sus comunidades de origen engañadas con una supuesta oferta de trabajo, deben trabajar largas jornadas para pagarle a los 'coyotes' o a los dueños de los bares que apenas les dan de comer o un lugar donde vivir, según las denuncias.
El viernes, en Comitán de Domínguez, El Salvador y Guatemala inauguraron un consulado conjunto para ayudar a velar por los derechos humanos de los indocumentados de ambos países que buscan llegar a Estados Unidos.
"Los hombres con que me acostaba a veces me regalaban unos pesos de más, eso lo fui guardando y cuando tuve un poco de dinero me escapé, y me siguió la chica hondureña. Yo me vine para Comitán y no sé adonde se fue ella", relató Montes.
En Comitán, primero consiguió trabajo en una taquería y luego en un negocio de venta de celulares, donde esta trigueña de larga cabellera negra trata de salir adelante.
Leonora Gámez no ve una salida cercana a su terrible situación: "Algún día, si no me he muerto, quizás me vaya a Estados Unidos".
Clientes de un bar de Tapachula, estado de Chiapas, México, el 7 de abril de 2011. Centenares de centroamericanas son obligadas a prostituirse en bares del sur de México para no ser denunciadas a las autoridades de migración.

http://es-us.noticias.yahoo.com/inmigrantes-centroamericanas-víctimas-explotación-sexual-sur-méxico-172526992.html